· FESVIAL, CNAE, AESLEME, STOP ACCIDENTES, y P(A)T-AP(A)T estamos convencidos deque no es necesario, ya que una subida de la velocidad aumentaría los accidentes yagravaría sus consecuencias.
· Son numerosas las investigaciones que demuestran la incidencia de la velocidad en la siniestralidad.
· ¿Asumiría usted más riesgos por hacer un recorrido de 100 km en 3 minutos menos?
Excmo. Sr. D. Mariano Rajoy Brey
Presidente del Gobierno
Madrid, 26 de mayo de 2013
Excelentísimo Sr.Rajoy:
Las principales entidades españolas dedicadas a la investigación, educación y prevención, formación de
conductores y ayuda a las Víctimas de Accidentes de Tráfico (FESVIAL, AESLEME, CNAE, STOP ACCIDENTES y (P(A)T-AP(A)T), que llevamos muchos años trabajando para disminuir el número de heridos y fallecidos en las carreteras españolas, nos dirigimos a usted porque creemos que tenemos el deber de informarle de los peligros que puede entrañar la subida del límite de velocidad a 130 km/h en algunos tramos de autovías y autopistas.
Son múltiples los estudios que demuestran lo que le expresamos: el conocido modelo "Power Model"
de Nilsson, por ejemplo, asegura que un aumento del 5% en la velocidad media, supone un aumento aproximado del 10% de los accidentes con heridos y del 20% de los accidentes mortales. Por el contrario, esta misma investigación destaca que reducir un 5% la velocidad media, supone una reducción aproximada del 10% de los accidentes con heridos y del 20% de los accidentes mortales.
La experiencia de otros países tambien sirve de ejemplo: aquellos que han aumentado el límite de velocidad, han incrementado en un 15-20% el número de fallecidos y, por el contrario, aquellos que la han reducido han conseguido disminuir entre un 12%-19% el número de víctimas mortales.
Si pensamos en un trayecto de 300 km, la diferencia de ir a 120 km/h a ir a 130 km/h es llegar 12 minutos antes;
en cambio, la energía cinética aumenta en un factor de 1,17, lo que significa que la distancia de frenado pasa de 60 a 70 m y el consumo de combustible aumentaría
en unos 5 ó 6 euros.
en cambio, la energía cinética aumenta en un factor de 1,17, lo que significa que la distancia de frenado pasa de 60 a 70 m y el consumo de combustible aumentaría
en unos 5 ó 6 euros.
De la misma manera, la gravedad de las lesiones en caso de accidente también será mayor.
Lo importante de este ejemplo es que los impactos finales se producirán con mayor energía y violencia, no pudiendo la estructura del vehículo absorber
satisfactoriamente esta diferencia de energía que,
lamentablemente, absorberán los ocupantes.
No sabemos si las barreras de seguridad están diseñadas para absorber impactos a 130 km/h, si el conductor sabrá que ha finalizado el límite de 130 km/h con los paneles de mensaje variable existentes, ni si se auditarán esos tramos para estar seguros de su seguridad, pero lo que sí creemos es que las personas conducirán más rápido (velocidad a la que salte el radar) y que las consecuencias de un despiste o error puede ser fatal.
Si bien contará con nuestro apoyo en casi la totalidad de los cambios del reglamento como la reducción
de la velocidad de 100 km/h a 90km/h en carreteras convencionales, que son las que actualmente
presentan una tasa más alta de siniestralidad;
la pacificación del tráfico en las zonas 30 km/h; el uso del
la pacificación del tráfico en las zonas 30 km/h; el uso del
casco en las ciudades por parte del colectivo ciclista o la obligatoriedad del uso del cinturón de seguridad para todos los colectivos, por comentar algunas de las nuevas medidas, en el aumento de la velocidad no podemos apoyarle, pues nuestra prioridad es salvar vidas y evitar los heridos graves.
Esperamos que tome conciencia de lo que supondría esta medida, en un “Decenio de Acción”, marcado por Naciones Unidas para disminuir a la mitad las víctimas mortales a nivel mundial (1.200.000/año) y que por tanto, esté a tiempo de eliminarla del reglamento antes de su aprobación en Consejo de Ministros.
Aunque los tramos de las autopistas y autovías estuvieran siempre en perfecto estado de mantenimiento, al igual que los vehículos (cada vez más antiguos) y las capacidades psicofísicas de los conductores, siempre puede haber un error humano (distracción, fatiga) y las consecuencias del mismo serán más graves a medida que la velocidad sea más elevada.
Esperando tome en consideración nuestras observaciones, dado que hablamos de vidas humanas, esté seguro de que puede seguir contando con nuestro apoyo para conseguir el objetivo de Naciones Unidas,
de reducir el número de fallecidos a la mitad.
Agradeciéndole de antemano su atención e interés, aprovechamos para expresarle nuestra más sincera
consideración.
Ana Novella
Presidenta Stop Accidentes
Eugenia Domenech
Directora P(A)T-AP(A)T
Mar Cogollos
Directora AESLEME
José Miguel Baez
Presidente CNAE
Javier Llamazares
Director FESVIAL
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